Procuremos un Avivamiento en Nuestro Corazón
Con frecuencia encontramos que la religión o rutina religiosa enfría el corazón del creyente, casi que sin darnos cuenta el fuego o pasión por Dios se apaga. Es interesante tener en cuenta aquí que uno de los símbolos del Espíritu Santo es precisamente el fuego. Debemos procurar el avivamiento en nuestro corazón, pues Cristo viene por una iglesia enamorada de El.
1 Reyes 18:36-39
Podemos ver en esta porción varias cosas muy importantes para avivar el fuego del Espíritu Santo en nuestro corazón: el profeta oro a Dios, obediencia, anhelo de ver Su gloria manifestada. El Señor requiere corazones sinceros. El fuego, poder y obra del Espíritu Santo producen una verdadera conversión en el corazón del hombre.
El fuego del Espíritu Santo es fundamental en la vida del creyente, pues la luz que dispersa las tinieblas es calor que consume el frio de la muerte espiritual, es la luz que trae orden a la vida. Es la luz que ilumina nuestro camino para no tropezar.
Dios tiene el poder de restaurar todas las cosas. Acerquémonos a Su presencia, y presentemos nuestra familia ante el altar del Señor en oración confiados en que poderoso es El para hacer milagros en nuestra familia. Permitamos que el Espíritu Santo avive Su fuego en nuestros corazones, y desechemos las cosas, cargas y pecados que procuran apagar el fuego de Dios en nuestro corazón.
Amen 🙏🙌 muy cierto. Dios le bendiga
ResponderEliminar