Multiplícate en Otros
Otra de las formas de poner a producir lo que nos ha sido dado, es ensenando a los demás lo que sabemos y es de suma importancia que lo hagamos porque Dios demandara lo que ha depositado en nosotros, acompañado de los intereses.
El don que te ha sido dado, se vuelve mas efectivo cuando lo usas para contribuir con la activación del don de los demás.
Recuerda que lo que tienes no es de tu propiedad privada, te fue dado por Dios para servir de bendición a la vida de otros.
No solo pases por la vida d ellos demás, ayúdalos a mejorar. Un mejorador, es aquel que posee la habilidad de llevar algo o alguien a un nivel mayor del que estaba antes. Para ser un mejorador debes entender que, sin importar la condición actual, todos pueden llegar a ser mucho mejor. Este punto es particularmente importante, porque si no pensamos que algo puede mejorar, no podremos el esfuerzo en hacer que mejore.
Por otro lado, debemos comprender que este proceso requiere de tiempo y esfuerzo.
Pero invertir en la gente nunca implicara una perdida. Por el contrario, representa uno de los mayores legados que podamos hacer a nuestra generación.
En la Biblia, encontramos diversos ejemplos de hombres y mujeres que fueron mejoradores, como es el caso de David, quien estando en la cueva de Adulam, pudo entrenar, pulir y moldear a un grupo de hombres que estaban heridos, enlutados, endeudados y amargados; haciendo que, de su condición inicial, pasaran a ser un ejercito poderoso, que llego a conocerse como “los valientes de David.”
Resulta interesante, el hecho de que ni el lugar cerrado en el que estaban, ni la condición en la que se encontraban, le impidió a David trabajar en la mejora y el entrenamiento de estos hombres (1 Samuel 22:1-2).
Contribuye al crecimiento de los demás y el Señor se encargará de recompensarte.
Es fácil reconocer el talento de alguien cuando ya ha florecido, pero se necesitan mas de aquellos que pueden verlo, cuando aun no se ha manifestado para contribuir con su florecimiento.
Un mejorador, es alguien que de lo malo extrae algo bueno y de lo bueno saca algo extraordinario. La diferencia que existe entre lo ordinario y lo extraordinario es el prefijo “extra” que implica añadir a lo ordinario: extra tiempo, extra esfuerzo, extra dedicación; extra conocimiento y extra dinero.
Si lo que está a tu alrededor no es bueno, es porque Dios quiere usarte para mejorarlo. Todo lo que pasa por tu vida debe ser mejor de lo que era, antes de llegar a ti.
Amen 🙏 gracias a Dios y x su misericordia hayudandonos aser mejores cada dia
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